1) Línea Ofensiva da el paso al frente
Uno de los factores más débiles del equipo ha sido la línea ofensiva pero esto no fue el caso ante los Buffalo Bills. Al fin se pudo correr con el balón con éxito en particular por el mismo centro aprovechando el bloqueo de los guards y el center. Mark Walton logro 66 yardas y totalizaron 109 yardas terrestres. Además, Ryan Fitzpatrick, quien logro 282 yardas la mayor producción aérea de la temporada, no sufrió ni un solo sack.
2) Jovenes figuras le dan inyección a la ofensiva
La contribución del recibidor Preston Williams, quien fue el líder con seis pases capturados para 82 yardas, y del tight end Mike Gesicki con cuatro pases atrapados para 41 yardas, le dieron fuerza a la ofensiva Miamense que había sido muy pobre en los primeros cinco juegos. Gesicki se notó seguro de sí mismo y quizás registro su mejor partido a nivel profesional. Este podría ser un arma importante para Fitzpatrick para el resto de la temporada.
3) Errores costosos deciden el partido
La intersección de Fitzpatrick y el fumble de Williams en el último periodo le quitaron a Miami la oportunidad de victoria. Esto le resulto al mínimo tres puntos a los Dolphins de la pizarra y ayudo a que los Bills obtuvieran una anotación que cambio el aspecto emocional del juego y le dio a Buffalo la ventaja que resulto decisiva. A estos errores unimos la corrida del oneside kick por parte de Bills' safety Micah Hyde para touchdown y la batalla para los Dolphins se hizo muy difícil en los minutos finales.
