1) PresiĂłn al quarterback afecta producciĂłn en primera mitad
El quarterback miamense, Josh Rosen, estuvo tratando de sobrevivir una intensa presión sobre todo en la primera mitad y esto influyo grandemente en la poca producción del juego aéreo. Rosen, sufrió cuatro4 sacks en la primera mitad y cinco en total. Debido a la presión, el tuvo que depender de un juego aéreo limitado que obviamente afecto el rendimiento de la ofensiva. Los Dolphins nunca atacaron verticalmente a los Redskins en los primeros tres periodos, masmås que nada, por la poca protección que estaba recibiendo el quarterback. Esto limita grandemente a la ofensiva y le da a la defensa la ventaja de jugar en un rectångulo pequeño depequeño de 10 yardas.
2) Fitzpatrick reviviĂł la ofensiva en el Ășltimo periodo
La producciĂłn ofensiva habĂa sido extremadamente limitada hasta que el veterano, Ryan Fitzpatrick, ingreso al comenzar el cuarto periodo. Ya en ese momento, la linealĂnea ofensiva habiahabĂa hecho ciertos ajustes y le estaba dando mayor protecciĂłn al quarterback. AdemĂĄs, Fitzpatrick, tiende a soltar el balonbalĂłn con mayor rapidez y esto tambiĂ©n ayudo en la recta final. Fue muy acertada la decisiĂłn de Flores, de incorporarlo en el Ășltimo periodo. Este conecto 12 de los 18 pases que intento para 132 yardas y un touchdown.
3) La Defensa se presentĂł a la batalla
Apezar de la derrota de 17 por 16, la defensa siempre se mantuvo en el juego y al final le dio al equipo una oportunidad de victoria. No permitieron puntos en el Ășltimo periodo, cuando Miami vino de atrĂĄs logrando dos anotaciones. Limitaron a Keenuman a 166 yardas aĂ©reas. Y aunque permitieron 145 yardas terrestres y 118 de Peterson, nunca los Redskins nunca pudieron contar con una corrida explosiva de 40 o 50 yardas que pusiera a la defensa miamense contra la pared.



